Cuida y protege tus labios cuando hace frío

La llegada del frío, el viento, la nieve y las bajas temperaturas pueden tener consecuencias perjudiciales para nuestra salud. Incluso el uso excesivo de la calefacción puede afectar de manera negativa a nuestra piel. Aunque solemos prestar atención a la sequedad en nuestras manos que están continuamente expuestas a las inclemencias del tiempo, hay que focalizar la atención en el rostro. Y especialmente en los labios, sobre todo si quieres que durante los meses de invierno luzcan sanos, hidratados y perfectos.

La piel de los labios es mucho más sensible y delicada que la del resto de la cara. Con el frío se vuelven más frágiles y quebradizos. Su piel fina se expone a condiciones climatológicas adversas como el viento, el sol y las bajas temperaturas. El resultado de todo ello es lucir unos labios deshidratados, quemados o agrietados. Además, aparecen algunas pequeñas heridas que son molestas y pueden sangrar.

¿Qué hacer para cuidar tus labios en la temporada de frío? Desde Farmacia Principal 124 te queremos dar los mejores consejos. Unas ideas y recomendaciones de expertos para proteger y prevenir el daño que sufren los labios durante estos meses de invierno. ¡Aquí los tienes!

Consejos para prevenir el daño de tus labios en invierno

Costumbres: a veces tenemos hábitos erróneos o efectos reflejos que nos llevan a empeorar el estado de nuestros labios. Para no dañarlos, nunca los humedezcas con saliva ya que este acto inconsciente acabará resecando y dañando aún más tus labios. Lo mismo ocurre con esas pielecillas y pellejos, que nunca debes arrancarlos si no quieres empeorar su estado. Acostúmbrate a hidratarlos de manera correcta todos los días.

Protección: aún nos quedan algunas semanas de frío y eso se nota en el descenso de las temperaturas. Cuando vamos a salir a la calle, tenemos que protegernos del frío invernal. No solo es necesario el abrigo, los guantes para las manos y el gorro para proteger tu cabeza; llevar una bufanda o un pañuelo para cubrir tus labios. Es una manera eficaz para evitar que estén continuamente expuestos a las inclemencias adversas del tiempo.

Exfoliación: solemos hacer una exfoliación de la piel de la cara y el cuerpo varias veces al mes. Los labios deben seguir la misma regala y hacerlo una vez a la semana. Eso sí, ten un especial cuidado y hazlo con suavidad ya que se tratar de una piel muy fina. Eliminar las pieles muertas para que tener unos labios suaves y lisos. Puedes llevar a cabo esta misión con una receta casera con azúcar y miel, o comprar en nuestra farmacia lo más adecuados.

Solar: obviamente la protección solar no solo hay que llevar a cabo durante la primavera y el verano. Los meses de invierno son muy peligrosos porque descuidamos la protección contra los rayos ultravioleta. Tu cuerpo y tu cara deben tener la protección solar adecuada, pero también tus labios. Para ello, emplea un labial con SPF, especialmente si vas a esquiar o pasar días en la montaña. Al llevar cierta protección solar, evitarás que tus labios se quemen.

Pintalabios: nos gusta estar guapas y lucir unos labios carnosos, incluso cuando hace muchísimo frío. Sin embargo, sería buena idea no abusar en exceso de los pintalabios permanentes ya que resecan mucho la piel. además, si tienes los labios secos o con grietas, descarta complementa su uso. Y para más información, también están desaconsejados los pintalabios de color oscuro.

Bálsamos: la mejor manera de desarrollar la hidratación de tus labios es a través de la hidratación. Debes tener a mano un buen bálsamo labial que hidrate a la vez que repara y protege tus labios en tu día a día. Lo mejor es que puedes emplearlos tantas veces como sea necesario. De hecho, nuestra recomendación es llevar uno siempre encima y usarlo en cuanto notes algún tipo de sequedad en tus labios.

Hidratación: sabemos la importancia de hidratar tus labios con buenos bálsamos labiales, pero también hay que hacerlo desde dentro. La hidratación no es solo exterior, sino también a través los líquidos. Por eso, es importante que bebas entre 1,5 y 2 litros de agua al día. Ahora que hace frío, puedes sustituir el agua por un té calentito que tiene muchas propiedades para mejorar tu salud.

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