Medicina biorreguladora: ¿qué es?
La medicina biorreguladora se encuentra en ocasiones enmarañada entre muchas popularmente llamadas “terapias alternativas” y puede pasar desapercibida o confundida con otras cuyo fundamento es desconocido o poco estudiado, pero la medicina borreguladora es otra cosa, el Dr Reckeweg (Alemania,1905-1985) desarrolló un concepto de enfermedad al que posteriormente se han unido muchos otros, como un fallo en los mecanismos defensivos o “reguladores” del propio organismo. Comprobó cómo determinadas sustancias que provienen del exterior o incluso procedentes del propio organismo (a las que llamó toxinas u “homotoxinas”), se van acumulando en el organismo. Cuando se sobrepasa la capacidad natural de éste para eliminarlas, aparece la enfermedad. Se trata pues de restablecer el equilibrio inicial del organismo estimulando la eliminación de toxinas y potenciando sus mecanismos reguladores, esto tan sencillo, es la base del tratamiento de la enfermedad que promulga la medicina biorreguladora.
Hemos de confesar públicamente nuestro escepticismo inicial , a pesar de que las plantas y la fitoterapia son nuestra pasión, hemos sido invitadas a extensas formaciones en medicina biorreguladora a las que aún acudimos y hemos sido gratamente sorprendidas. Los estudios realizados demuestran con pruebas que medicamentos como Traumeel pomada reduce el dolor y mejora la función articular en la misma medida que un diclofenaco , en un esquince de tobillo , por ejemplo: otros medicamentos como el Vertigoheel, para mareos y vértigos, tiene estudios comparativos con dimehidrinato, betahistina y Ginkgo Biloba, y hay muchos más.
Vamos a intentar trasmitir aquí algunos conceptos generales para poder entender mejor los tratamientos y alguna terminología básica también sobre los medicamentos de medicina biorreguladora, después, si quereis y estais interesados , podemos seguir con varios artículos centrados en patologías de la piel, sistema circulatorio, ginecológico, respiratorio, nervioso, digestivo, locomotor y el síndrome metabólico y si os parece además intentaremos poner algunos casos prácticos.
Así pues,la medicina biorreguladora, tiene una visión general del organismo , no trata la enfermedad únicamente desde el punto de vista de los síntomas o de un único órgano diana,sino que hay que intentar actuar sobre la causa que está produciendo el problema. Inicialmente se consideran que son las homotoxinas, tóxicos de todo tipo en el sentido clásico, pero también consideran por ejemplo que el estrés es una toxina o la lactosa si uno no tiene bastante enzima lactasa para digerirla.
Desde que nacemos nuestro cuerpo va recibiendo toxinas y las va eliminando, primero mediante mecanismos como el vómito, la hipersudoración, la diarrea, hipermenorrea etc. La medicina clásica utiliza antieméticos, o antipiréticos, para mejorar de forma rápida la sintomatología, pero eso puede significar bloquear el mecanismo de detoxificación del organismo.
Ej: un niño que vomita a menudo la leche se le puede prescribir una leche antirregurgitación que es una leche más espesa que hace casi imposible el vómito, pero eso implica bloquear el mecanismo que tiene para eliminar algo que no le está sentando bien y la acumulación de ese “tóxico” puede producir otros efectos con el tiempo ej. Dermatitis erupciones diarreas etc.
En la medicina biorreguladora se le da mucha importancia a la matriz extracelular, el medio en el que “nadan” las células y al que se vierten muchas de esas toxinas, además por ejemplo las neuronas no contactan de forma directa con otras células sino a través de de ésta matriz, es decir, es como un filtro que aunque no tiene funciones especificas su “salud” es un determinante de nuestro bienestar. Su estructura es muy compleja, está formada por biopolímeros de azucares junto con fibras reticulares como elastina, colágeno, fibronectina etc., tiene mucha capacidad de adaptarse a cambios continuados por su elevado potencial de diversidad estructural, para hacernos una idea con 4 monosacáridos se forman unos 36.000 azucares diferentes.
En el proceso de contacto con estas homotoxinas tenemos varias fases:
- Una fase de excreción donde el organismo se ve atacado por algo que no puede procesar y lo elimina mediante mecanismos muy llamativos y bruscos vomito, sudoración, diarrea etc.
- Una fase de inflamación, que en este momento se trata de una inflamación benigna con la que el cuerpo quiere eliminar lo que el vómito no ha podido para evitar que se deposite en la matriz extracelular, si también abortamos la inflamación se depositara finalmente en la matriz extracelular.
- Deposición: el cuerpo no ha conseguido eliminar la toxina, han fallado los dos primeros mecanismos o bien los hemos bloqueado continuamente o bien hay muchas toxinas y se acaban depositando. Pero aún son depósitos benignos unidos por fuerzas débiles que se pueden desprender con la fiebre y pasar a linfa y eliminarse.
A partir de aquí ya pasamos una “line roja” llamado el CORTE BIOLOGICO que separa la salud de la enfermedad. La sintomatología a partir de entonces no es tan brusca ni escandalosa.
- En la fase de impregnación, las toxinas ya se unen con enlaces más fuertes, más difíciles de romper y por tanto estas homotoxinas son más difíciles de eliminar con lo cual son un obstáculo para el paso de la información través de la matriz extracelular.
- Se produce una asfixia de las células y puede haber también acidificación del medio. Se pueden dar bloqueos enzimáticos o de rutas metabólicas.Fase de degeneración: cada vez la situación se agrava más y esto conduce a apoptosis o muerte celular con una pérdida de función celular que acaba en pérdida de funcionalidad de los órganos.
- la última fase es la desdiferenciación: que desemboca en proliferación anormal oncogénesis y cáncer.
Todo tratamiento en medicina biorreguladora está fundamentado en tres pilares, el primero y fundamental es la detoxificación hepatica, renal y linfática después la inmunomodulación, modular la inflamación manteniendo su efecto de señal natural y finalmente inducir la reparación de los órganos afectados. Son tratamientos profundos que tratan siempre el problema de raíz. No debemos llegar a los estadios finales pues cada vez el tratamiento es más dificil.
Pronto os seguiremos contando…
Fuentes:
estudio doble ciego de Traumeel® frente a AINEs (Diclofenaco). Este estudio ha sido publicado recientemente en el International Journal of Clinical Practice.González de Vega C, Speed C, Wolfarth B, González J.
Traumeel vs. diclofenac for reducing pain and improving ankle mobility after acute ankle sprain: A multicentre, randomized, blinded, controlled and non-inferiority trial.
Int J Clin Pract 2013;67(10):979–989. Doi: 10.1111/ijcp.12219
Diseño del estudio: estudio de no inferioridad, aleatorizado, con control
www.heel.es
Freedigital photos
Fa****** ********* *24 19/03/2015 Responder
Mil gracias Nuria por estar ahí! esta clase de cosas son las que me motivan cada día...Nu*** *****la 19/03/2015 Responder
Menudo lujo poder leer tu artículo sobre la M. Biorreguladora y la importancia de la matriz extracelular.Cómo aprendemos contigo Cristina !!!! Ya sólo esperando a tu siguiente artículo, gracias,
Nuria Padilla desde Las Palmas de Gran Canaria